Vamos a lo importante: ¿Sabes bailar reggaetón?

Qué vergüenza. Es lo que sentí cuando estaba viendo la televisión y llegué hasta el programa de El Hormiguero, de Antena 3. Hace dos días asistieron como invitadas las protagonistas de la nueva serie de Netflix Las chicas del cable, Blanca Suárez, Maggie Civantos, Nadia de Santiago y Ana Fernández. La serie narra la vida de cuatro mujeres que en los años 20 deben abrirse camino, tanto profesionalmente como socialmente. La dificultad, en aquellos años, nos la podemos imaginar. De hecho la serie empieza así: En 1928 había 2.00 millones de personas en el mundo, con sus propios sueños, sus ilusiones y, sobre todo, sus problemas. La vida no era fácil para nadie. Y mucho menos si eras mujer. No éramos libres, pero soñábamos con serlo”. ¡Guau…!

Pero Pablo Motos y su equipo olvidaron por completo que esas cuatro actrices estaban allí para hablar de su serie (que se verá nada más y nada menos que en 190 países de forma simultánea), ni mucho menos del trasfondo de ésta por su carácter tan (necesariamente) feminista. ¿Chicas jóvenes y guapas? Lo importante es preguntarles si saben bailar reggaetón, con qué actor les gustaría protagonizar una escena de cama o cuántos piercings les cabe en la oreja. No estoy exagerando, eso fue exactamente lo que pasó. Tampoco se cortó en poner reggaetón y decirles: ¡bailad!

Qué repugnancia y vergüenza ajena.

Me alegra saber que, al menos, estas actitudes tan lamentables empiezan a ser perceptibles por los ojos de la gran mayoría de personas. Al menos, ardió la red a lo largo del programa y al día anterior, y al menos, se han ocupado páginas de periódicos hablando del tema. Es penoso que aún se sigan produciendo actitudes tan machistas, sobre todo en los medios de comunicación y en un programa de máxima audiencia como es el Hormiguero, pero al menos se detecta, se hace visible y se condena. Esto último, socialmente, claro está, dudo mucho que Pablo Motos mañana pida perdón públicamente por su actitud machista y lamentable. Quedará ahí, y en dos días se olvidará. Pero quedémonos con la parte positiva: la condena social creciente ante este tipo de actitudes. Espero que Pablo Motos y su equipo, pasen mucha vergüenza estos días.

¿Qué pasó exactamente? Este artículo de El País no puede explicarlo más bien.

Aquí os lo dejo, para que juzguéis vosotros/as mismas, y además, tenéis el programa online en la web de Antena 3.

Enlace al artículo de El País:“¿Por qué no bailas reguetón tú, Pablito, guapo?”